Teatro Romano: El asentamiento romano superó los límites de la Malaka fenicia. En su empeño por mejorarla, implantaron el latín en la ciudad, impusieron sus leyes, costumbres e ideas. De la época del emperador Augusto (27 a.C. - 14 d.C.) data la construcción del Teatro, constituyéndose como uno de los más antiguos de Andalucía. De medianas dimensiones, abarcaba hasta la actual Plaza de la Merced. Fue ampliado y modificado en época flavia, funcionando de forma continuada hasta el siglo III d.C. Por desgracia, en época musulmana fue usado como cantera de materiales para la algunas construcciones de la Alcazaba. Fue descubierto en 1951 con unas obras para la Casa de la Cultura, que hicieron aparecer los restos ocultos durante siglos.

musulmán) fue capital del reino Taifa lo que supuso un crecimiento demográfico, y un enriquecimiento político y económico transcendental. Tanto la Alcazaba como la mezquita mayor son las
Castillo de Gibralfaro: Los orígenes de un recinto en el monte Gibralfaro datan de la época fenicio-púnica de la ciudad, en donde posiblemente se situaba una atalaya costera coronada con un faro, como se deduce del nombre Monte del Faro, o Gibralfaro (Yabal-Faruh, Yabal, monte / Faruh, faro). De cualquier forma, en época romana ya se constata la presencia de un faro en el monte. El Castillo como tal data su fecha de construcción durante el reinado de Yusuf I (1332-1354) durante el siglo XIV. El Castillo de Gibralfaro conecta con la Alcazaba por su lado nordeste, y tenía como finalidad albergar a las tropas y proteger a ésta. Paradójicamente, cuando a partir de 1487 los Reyes Católicos conquistaron Málaga, el Castillo sirvió como cárcel de la población y el ejército musulmán.




Fuentes: